martes, 18 de agosto de 2015

El Árbol Milagroso

Como sembrarlo
Consigue algunas semillas de Moringa en uno de los tantos establecimientos que las venden. Existen muchas variedades, pero las más fáciles de conseguir son la Moringa oleifera y la Moringa stenopetala.
Las semillas de Moringa Oleifera son circulares, marrones y aladas. Las semillas de la Moringa Stenopetala sin su cáscara tienen forma de almendras y un color canela claro. Las semillas son bastante diferentes, pero ambos tipos de semillas hacen crecer árboles Moringa. En realidad, básicamente las semillas tienen el mismo tamaño, pero su apariencia es totalmente distinta.
Moringa oleifera
  Si deseas un árbol que durante el primer año crezca rápido y que tenga hojas, flores y vainas con semillas llamadas baquetas, elije la Moringa Oleifera. Las baquetas que cuelgan de la Moringa contienen las semillas del árbol. Puedes plantar las semillas cuando la vaina esté seca o puedes almacenarlas para plantarlas después.
•Si deseas tener un árbol de crecimiento rápido que tenga muchas hojas largas y que la tarea de recolección de hojas sea fácil, elije la Moringa Stenopetala.
•Las flores y vainas con semillas de la variedad africana Moringa Stenopetala demoran un poco más en crecer.
Decide el lugar en el que deseas que tu Moringa crezca. Ten en cuenta que la Moringa puede crecer más de 6 m durante el primer año. Crece en promedio 4,5 m pero en condiciones óptimas puede crecer mucho más. Debes considerar si deseas plantar tu Moringa cerca de estructuras que ya existen, pues las ramas crecerán alrededor de 0,9 a 1,2 m durante el primer año. La Moringas necesitan mucha luz solar, calor y agua para poder crecer bien, por eso piensa en qué lugar tu árbol obtendrá la mejor exposición solar.
Consigue el mejor compost orgánico que encuentres. Ellas crecerán en suelos pobres, arenosos y estériles, no les gusta que sus raíces se mojen. Ten en cuenta esto y si es necesario compra arena para agregarla a la mezcla de compost o usa cualquier tipo de tierra que se encuentre disponible en tu área y agrégale fibra de coco, musgo de pantano, perlita o arena para que esté suelta. Esto da espacio a las raíces de la Moringa para que se vayan al fondo y drenen bien. Las Moringas tienen una raíz primaria, esto quiere decir que tienen una sola raíz que se va hacia el fondo como las raíces de la zanahoria. Tienen raíces alimentadoras pequeñas, pero no tienen raíces con ramas. Planta el árbol en un lugar en el que la raíz primaria tenga espacio suficiente para ir hacia el fondo. Si la plantas en un contenedor, hazlo en el más grande que tengas. La Moringa puede crecer como un árbol solitario, en fila o como seto. Si quisieras hacerla crecer como seto, planta las semillas a 30 cm de distancia entre ellas. Retira algunas de las hojas que están creciendo para que obligues al árbol a crecer como arbusto y cuando tenga una altura de 30 cm corta las ramas a lo largo y por la mitad, y retira las hojas nuevas que brotan en la superficie de la Moringa.
Si deseas que tus Moringas crezcan en filas, entonces planta las semillas a una distancia de 90 cm  en filas que estén separadas a una distancia de 1,80 m para que puedas retirar la hierba y caminar entre las filas de manera fácil.
Si vas a plantar tu Moringa como un árbol solitario, recuerda darle mucho espacio para que sus ramas puedan extenderse. Corta la parte superior del árbol para estimular un nuevo crecimiento y también corta el largo de las ramas por la mitad. Esto asegurará el buen crecimiento de la Moringa y crecerán muchas flores hermosas, hojas nutritivas y baquetas en los siguientes años.
Haz un hueco en el suelo y planta las semillas de Moringa a una profundidad de 2 cm a 2,5 cm (¾ a 1 pulgada) tápalo con tierra y apisona el área donde colocaste las semillas. Toma nota del día en el que plantaste la semilla o semillas para que monitorees el crecimiento. Cuando hayas cubierto las semillas, riega todo el suelo; no importa si plantaste las semillas en macetas o en la tierra, necesitarán recibir agua todos los días hasta que veas que la semilla germina. Cuando las semillas hayan brotado, puedes regarlas cada dos días hasta que alcancen una altura de 45 cm. Luego, es suficiente si las riegas una vez a la semana. •Algunos riegan las semillas hasta que germinen y luego las plantan. Este método también es válido pero las semillas de Moringa son muy fuertes y no necesitan este paso adicional.
Una alternativa para propagar las Moringas son los esquejes. Selecciona las ramas de 5 a 6,5 cm  de diámetro y haz cortes de 60 a 75 cm de largo. Puedes cortar el inicio de las ramas en un ángulo de 45 grados, para que estén más expuestas a la superficie del suelo. Luego, puedes plantarlas en el suelo con el esqueje enterrado a una distancia de 20 a 25 cm (8 a 9 pulgadas) de profundidad. Riégalos de manera periódica y verás que saldrán hojas nuevas en el tallo. La ventaja de plantar un esqueje es que crece y florece más rápido que una planta que sale de la semilla. Las Moringas que crecen de los esquejes retienen todas las cualidades de la planta madre.
•Una persona que vive en Florida ha tenido excelentes resultados en la propagación de Moringas con esquejes de varios tamaños, esta persona coloca las ramas, podadas como ya se indicó anteriormente, en una maceta grande llena de tierra. Es necesario regar los esquejes todos los días, pues el agua permite que se drene libremente. En más o menos 2 semanas, brotarán hojas a lo largo de los esquejes y la planta del semillero germinará de la base.
•Puedes cocinar un poco las flores nacientes y las flores, y luego comerlas como verduras nutritivas.
•Ten tijeras de podar a la mano, mientras más las podas, más rápido crecerán.
•Puedes comer las hojas, vainas, flores nacientes, flores y semillas. Debes cocinar las flores nacientes y las flores, puedes comer las semillas crudas o cocinarlas y también puedes comer las hojas. Existen muchos sitios en línea que te indicarán cómo incorporar las hojas en tu dieta. Las hojas se comen crudas, las tomas directamente del árbol y te las puedes comer ahí mismo o puedes agregarlas a las ensaladas o en las comidas. Mucha gente alrededor del mundo las come con pollo, pescado, cerdo, res, cordero o cualquier otro tipo de carne o puedes saltearlas ligeramente y comerlas como una guarnición. Puedes agregar las hojas de Moringa a las sopas, estofados, arroz, cereales o productos de panadería. Cuando las adiciones al plato principal, es más beneficioso si agregas las hojas al final para conservar todos los nutrientes que se pueda.
•Debido a que la Moringa crece de manera muy rápida, puedes mantenerlas a una altura considerable si retiras lo que crezca en la parte superior del árbol y cortas las ramas a lo largo y por la mitad. Esto hará que la Moringa se ramifique a lo largo del tronco y evitará que tu árbol alcance una altura de 9 m y que tenga flores nacientes, flores, hojas y vainas difíciles de alcanzar.
•La Moringa resiste la sequedad, pero NO resiste el frío. Las heladas pueden ocasionar su muerte.
•Si deseas poder alcanzar los frutos de tu Moringa, mantén su altura de 2,5 a 3,5 m como máximo. De lo contrario, tendrás un árbol muy alto, delgado, con ramas en la parte superior, inaccesible y poco atractivo.
Gente de todo el mundo come las raíces. No comas las raíces. Estas tienen sabor a rábano picante y la corteza de la raíz contiene una neurotoxina potente que en grandes cantidades puede ser mortal. No toques las raíces.
Es impresionante ver que algunos sitios de internet recomienden a las mujeres embarazadas que no coman las flores, ya que puede ocasionar abortos. Si esto es verdad, las mujeres embarazadas deberían evitar comer las flores y los brotes.
Poda constantemente tu Moringa, hazlo desde la parte superior. Esto estimula al árbol a que salgan más ramas a lo largo del tronco. También podrías cortar por la mitad las hojas de las ramas, así obligas a las hojas nuevas a que crezcan en las bifurcaciones de las ramas. No deseches la poda. Voltéalos, colócalos debajo de los árboles para que sirvan como hierbas de abono.
Propiedades de la Moringa
La moringa, especie vegetal que por sus cualidades es conocida en el mundo como el árbol milagroso,
Las posibilidades de la planta son inmensas para la alimentación humana y animal, además de sus propiedades medicinales y la ventaja de soportar períodos prolongados de sequía.
Sus semillas maduradas en las vainas, contienen todas las vitaminas del complejo B en grandes cantidades, y se componen de 35 a 40 % muy similar al de olivo, sostienen publicaciones digitales especializadas.
El valor nutricional del arbusto es cuatro veces superior en vitamina A a la zanahoria, supera con creces el contenido de vitamina C de la naranja, el de calcio de la leche, el potasio del plátano, mientras tiene un 25 % de proteinas más que el huevo.
Las propias fuentes añaden que posee los ocho aminoácidos esenciales para el ser humano y cantidades significativas de hierro, magnesio y otros nutrientes, en tanto partes como las semillas, raíces u hojas son utilizadas ante dolores de articulaciones, inflamaciones y problemas digestivos.

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